Hablaremos de un procedimiento muy popular, de los más frecuentemente realizados y que curiosamente todos parecen querer evitar. Pero una vez se realiza causa una gran satisfacción y alivio a quien ha tomado la decisión.

Porqué lo querrán evitar? La razón es por la cicatriz, la cual es grande. Siempre me ha llamado la atención la importancia que le da la gente a la cantidad de puntos que conlleva una cirugía. Me han dicho que entre más puntos contenga una cirugía significa una cirugía más grande. Lo cual no es del todo cierto, ya que con las técnicas endoscópicas a través de pequeñas incisiones por fuera del cuerpo se realizan muy grandes cirugías por dentro del cuerpo. También es común que en pequeñas incisiones por fuera del cuerpo se ponga una gran cantidad de puntos como sucede en la cirugía de la nariz. Me han dicho también que los puntos pueden ser feos o no agradables a la vista. Esto es muy cierto, sin embargo el trabajo de los cirujanos plásticos es principalmente realizar cicatrices discretas y utilizar técnicas especiales para obtener la mejor cicatriz posible. No entendía la importancia que se le da a la cantidad de puntos porque es mi área de expertise y sobresalgo creando cicatrices lo más sutiles posible. Cualidad que me ha ganado la confianza de numerosas personas para la realización de otros procedimientos estéticos que desean obtener. Puedo entender el interés suscitado por la cantidad de puntos pero hay mucho más que eso en la decisión de realizarse un procedimiento estético.

Tomemos como ejemplo el siguiente caso:

Es un caso exagerado, pero es más sencillo para comprender. Podemos ver como presenta un exceso de piel en su abdomen que se traduce en muchos pliegues alrededor del ombligo. Situación similar a un vestido que nos queda muy grande. Esta mujer nos cuenta que después de tener a sus gemelos su piel nunca regresó a su estado previo. Nos comparte también que le gusta hacer ejercicio, lo cual no solo no le ha ayudado a mejorar esta situación sino que exacerba su sentimiento de incomodidad. Expresa sentirse incómoda consigo misma cuando se ve al espejo, físicamente incomoda al realizar ejercicio ya que siente que su piel no es como una lycra, sino más bien como una pijama y por si fuera poco no tiene el valor de ponerse un bikini o ropa interior atractiva. La realización de este procedimiento siguiendo los embarazos es muy frecuente. Podemos comparar este fenómeno al de un globo que después que se infla no regresa a su estado previo. Nuestro cuerpo, siguiendo la expansión abdominal por haber hospedado a un bebé, muchas veces no regresa a su estado previo. Causando tener demasiada piel para un cuerpo más pequeño.

Las fotografías ilustran una candidata ideal porque se encuentra en su peso ideal, lo que conlleva a poder valorar más precisamente el exceso cutáneo. Así como cuando se miden el vestido de bodas las novias, siempre será más fácil la confección del vestido de una novia que ha mantenido su peso toda su vida a aquella que esta en dieta justo antes de la boda. A esta última, no solo habrá que ajustarle su vestido varias veces, sino que además muy probablemente si no persevera con un estilo de vida saludable no podrá volver a utilizar su vestido; como para por ejemplo la realización de una sesión de fotografías para recordar el matrimonio 5 años después. La cicatriz que presenta es extensa y va desde donde inicia su pliegue de un lado del cuerpo hasta donde finaliza del otro lado del cuerpo cuando se sienta. Los resultados no solamente le permiten realizar ejercicio de una manera mucho más cómoda sino que la colocación estratégica de la cicatriz le permiten usar bikini y su ropa interior favorita sin que esta sea visible. Es hermoso ver como la confianza regresa a ella y al verse al espejo la cicatriz la hace más fuerte ya que le recuerda su hermosa historia de mamá.

El segundo caso también es un caso típico en el cual el exceso de piel es por otra razón:

Debajo de nuestra piel, todos tenemos grasa en distinta cantidad. Generalmente tenemos de 1 a 2 cm de grasa debajo de la piel, sin embargo, a veces puede ser un número mucho más grande. En este caso esta mujer nos cuenta que nunca ha estado embarazada pero que ha logrado bajar 115 libras gracias a un cambio de estilo de vida basado en una dieta saludable y en la realización de ejercicio (lo cual es digno de aplauso). Es una excelente candidata que no solamente se encuentra actualmente en su peso ideal sino que ha logrado mantenerlo por 6 meses. El efecto que tiene en la piel por haber padecido obesidad, es el mismo que se puede presentar después de un embarazo. La piel se ajusta a una silueta más grande y a la hora de regresar a una silueta acorde a la estructura ósea, la piel no logra ajustarse y tenemos de más. Así como los efectos sobre la piel a causa de la obesidad son similares a los producidos por los embarazos, los efectos en el bienestar son similares: causando incomodidad al realizar ejercicio, al ponerse una blusa corta o al verse en el espejo. La cicatriz es grande y paradójicamente es a la vez discreta encontrándose invisible a los ojos de la mayoría. Además el resultado produce tanto bien, ya que le recuerda como ha tomado entre sus manos su bienestar, que la cicatriz pasa al olvido de quien la porta.

La abdominoplastia o tummy tuck es un procedimiento de gran satisfacción para el paciente ya que le mejora su diario vivir en tantos aspectos (autoestima, mejora la función del cuerpo durante el diario vivir, la aptitud del cuerpo a la realización de ejercicio, disminuye el dolor de la postura). El procedimiento es ambulatorio es decir regresas a casa el mismo día, su realización toma alrededor de 4 horas y se realiza bajo una sedación profunda controlada por un anestesiólogo. Las cicatrices a pesar de ser las más extensas en el campo de la cirugía plástica, son discretas y se olvidan con facilidad por el bienestar que aportan. El regreso a las actividades de la vida diaria es alrededor de 10 días, pudiendo reanudar la actividad física a partir de la cuarta semana.

Los riesgos menores son bajos (menor a 5%) y generalmente son asimetrías, infección de la herida, cambios en la sensibilidad o cicatricación tardía. Los problemas más severos que suceden en menos de 1% son la formación de coagulos en la pierna que pueden llegar a afectar los pulmones y poner en riesgo la vida.

La abdominoplastia o tummy tuck puede que no alargue tu vida pero sin duda alguna mejorará tu caminar en esta vida.

El rango de precio inicia a partir de 5500 USD (corresponde a las consultas antes y después del procedimiento, a la utilización del quirófano y los consumibles durante el procedimiento, a los honorarios del equipo quirúrgico y anestésico, así como a los medicamentos durante la recuperación) y será definido por el plan tratamiento sugerido por tu cirujano plástico, estético y reconstructivo. Como bien sabemos no todos los vestidos se ajustan a todos los cuerpos. En Kintsugi no buscamos resultados genéricos: pensamos como artistas, planificamos como arquitectos y ejecutamos como ingenieros. Al igual que con un vestido, el resultado de tu tratamiento es lo que la gente verá cuando te conocerá. Es una inversión en ti.

En Kintsugi será un honor poder caminar a tu lado.